Pasar al contenido principal
Museo Roca - Instituto de Investigaciones Históricas

Un lema para el Museo

Bajo el lema "Amicus Plato. Sed magis amicas veritas", el 17 de julio de 1964 se inauguró formalmente el Museo Roca, una institución destinada a la investigación científica donada por José Arce y Amalia Bazán al Estado Nacional. ¿Qué significa esa frase?

Cuando creó el Museo Roca, José Arce junto con su principal colaborador, Narciso Binayán, decidieron establecer un lema para la institución. Optaron por una frase en latín, por ser una lengua que se enseñaba en todas las universidades de ciencias sociales junto con el griego, y que otorgaban cierta categoría a quienes las citaban. 

El lema fue: “Amicus Plato. Sed magis amicas veritas”.


(Foto del día de la inauguración del Museo Roca, el 17 de julio de 1964. El doctor Arce frente al bronce que se colocó en el ingreso a la institución).

En primera instancia, podría pensarse que la frase replicaba un modelo del saber eurocéntrico en forma acrítica; sin embargo, en la explicación del establecimiento del lema, aluden inspirarse también en “Sayat nasti paro Dharmah”, una frase hindú que se traduce como “no hay religión más elevada que la de la verdad”.

“Amicus Plato. Sed magis amicas veritas”

Luego de elegir el lema, “Amicus Plato. Sed magis amicas veritas”, Arce se mandó a grabarla en letras de madera en el ingreso a la sala principal del Museo. La frase se le atribuye a Aristóteles y se traduce como “Soy amigo de Platón, pero más amigo soy de la verdad”.


(Foto del ingreso a una de las salas principales del Museo Roca. El lema recibe a todos los visitantes).

Como explica Binayán, se establecía con ella un sendero para el Museo donde se buscaría la verdad más allá de las pasiones. Para lograrlo se indicaba que la Historia debía seguir a las fuentes y el rigor metodológico. Asimismo, se indicaba que esa verdad anhelada podía luego convertirse en error por la aparición de nuevas evidencias o por el avance de los razonamientos.

De este modo, la línea del Museo se correspondía con las perspectivas más actualizadas de su época en el campo de la Historia. La presencia de las fuentes era clave en la construcción del saber histórico y se correspondía con el impulso que habían tenido, desde la década de 1920, con la generación de historiadores que se conoce como Nueva Escuela Histórica, quienes profesionalizaron la disciplina.

(A la izquierda de la imagen, el doctor Arce durante la inauguración del Museo Roca, el 17 de julio de 1964. De fondo, la imagen del expresidente y figura que inspiró la institución).

Sin embargo, Binayán remarcaba que ese apego a las fuentes debía ser también acompañado por el razonamiento riguroso, asimilando las críticas que se le habían realizado a esa corriente. De este modo, la búsqueda de la verdad mediante un método de trabajo con fuentes y razonamientos revela asimismo el carácter científico que pretendía ostentar la Historia en ocasiones en desmedro de su valor literario.

En perspectiva, desde la actualidad se puede advertir que el lema original del Museo no fue respetado por sus creadores a la hora de ponderar a la figura de Julio A. Roca. Sin embargo, esto no era percibido como una contradicción. Hoy sabemos que los principios que envuelven a este lema de la primera gestión del Museo han sufrido numerosos embates por parte de diferentes corrientes.

(Foto del frente del Museo Roca en el año 1933, publicada en una Revista de la época, cuando todavía no era Museo).

Aún así, la discusión en torno al lugar de la verdad en la historia sigue siendo una fuente de inspiración y debate en las ciencias sociales.

Más información

Lee más sobre el Museo Roca en esta nota sobre su fundación.