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Museo Roca - Instituto de Investigaciones Históricas

Día Internacional de los Museos 2023: “Museos, sostenibilidad y bienestar”

El cuidado sustentable de los recursos naturales y la trashumancia en crianceros de Ñorquincó

En el Día Internacional de los Museos, queremos aprovechar para contarles uno de los proyectos abordados en el Museo Roca. Desde marzo del año 2022, comenzamos a trabajar en un proyecto de investigación con la comunidad indígena Ancalao, en la localidad de Ñorquincó, en el suroeste de la provincia de Río Negro. Parte de este desafío se relaciona con el objetivo de realizar trabajos en territorio, que apuesten al acercamiento con las comunidades y sus experiencias.

Registro equipo Museo Roca.

La historia de la localidad patagónica se remonta al otorgamiento de tierras por decreto nacional, en 1900, durante la segunda presidencia de Julio A. Roca, al cacique Rafael Ancalao y a los 143 integrantes de su tribu. Al mismo tiempo, el pueblo fue recibiendo migraciones de diversas familias indígenas, criollas y extranjeras, en su mayoría de ascendencia sirio-libanesa. 

De este modo, se fueron asentando en Ñorquincó los abuelos y bisabuelos de los actuales pobladores locales. Teniendo en el presente, un estilo de vida de tipo rural, donde la principal actividad económica se relaciona al sector agropecuario a pequeña escala.

Al seguir teniendo una fuerte impronta indígena, muchos de los pobladores, siguen sosteniendo antiguas prácticas que se relacionan con el conocimiento y cuidado de su entorno natural.

En esta oportunidad les contaremos sobre la trashumancia de crianceros de la localidad. Una práctica sociocultural relacionada al pastoreo, que se basa en el desplazamiento estacional del ganado, para el aprovechamiento de pastizales y el cuidado del entorno natural.

Esta es una importante actividad, que no sólo depende del ritmo de las estaciones del año, sino que, y sobre todo, requiere de un conocimiento ecológico del lugar. En el caso de Ñorquincó, caracterizado por la estepa y la pre cordillera de los Andes.

Eduvino, un productor local con quien conversamos y heredero directo del linaje Ancalao, nos cuenta las distintas actividades que intervienen en el ciclo de la trashumancia. En esta, se realiza el desplazamiento de los animales desde los campos más bajos de “invernada” a los valles más altos de las “veranadas” cordilleranas con un objetivo sustentable. “Hacer la veranada es ir a una nueva pastura, que le dé bienestar al animal. Pero también, es más que sólo eso, tiene que ver con el cuidado del entorno, que es nuestro medio de vida. Por eso hay toda una preparación previa, que arranca desde meses antes” (Eduvino A. 10/05/2023. Ñorquincó). 

La actividad trashumante 

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La veranada se realiza aproximadamente entre los meses de diciembre a abril, y es fundamental que sea en el momento apropiado, ya que hacerla en un tiempo incorrecto puede generar consecuencias ecológicas negativas, como el deterioro de las pasturas o la falta de los rebrotes en caso de que se efectúe antes de tiempo. 

Como espacio socio-productivo, lo que se busca es complementar la aridez de la estepa, con la mayor disponibilidad de recursos naturales, como el agua y la vegetación.

Eduvino nos cuenta que la veranada involucra un conocimiento ancestral que es transferido entre las generaciones familiares. Desde las primeras infancias se les va enseñando a los niños sobre el pastoreo de los animales y el modo en que se los debe preparar para la actividad trashumante.

La preparación previa es muy importante y arranca desde meses antes, para que en diciembre los animales ya se encuentren listos para el viaje.  La tropa de animales no sólo involucra al ganado, sino también a los que acompañarán el viaje, como perros y caballos, que también se irán preparando con antelación.

“La tropa que va a la veranada es cuidadosamente seleccionada, y se les hace un tratamiento previo, por ejemplo, la vacunación previa es muy importante. También se empiezan a amansar los potros desde antes. (…). Las ovejas deben ya estar paridas, y se seleccionan los novillos que van a engorde. Se escogen los toros y los caballos que van a ir” (Eduvino A. 10/05/2023. Ñorquincó). 

En el lugar de la veranada queda viviendo un pariente o un peón a cargo del cuidado de los animales. El resto de la familia volverá a sus casas, y cada mes, alguien subirá para cerciorarse del bienestar del cuidador y proveerlo de alimentos.

Registro equipo Museo Roca.

Para la finalización del ciclo de la veranada hay distintos indicios naturales y actitudinales de los animales.

Nos comenta Eduvino, que los animales van marcando la hora del regreso. “Cuando la hacienda ya se muestra inquieta va mostrando que no quiere estar más en ese campo. Los animales se van porfiando, las vacas van agarrando el camino de regreso”.

Hacía finales del mes de marzo, luego de producido el primer temporal grande de lluvia y de caída la primera escarchilla en la cumbre de la montaña, se marca el fin de la temporada estival y el inicio del otoño, mostrando que es la hora del regreso.

¿Por qué es importante que continúe esta práctica?

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Los nativos del lugar poseen profundos conocimientos sobre el cuidado del ecosistema, es por esto que la actividad trashumante, es mucho más que sólo trasladar a los animales en los ciclos estacionales. Como nos ha contado Eduvino, son prácticas sustentables que van más allá de sólo buscar el bienestar del animal, sino también, es la toma de conciencia de protección del entorno que se habita.

La práctica trashumante se encuentra en peligro de desaparición. Una de las principales razones se debe a la reducción de los espacios de usos de la ganadería, hecho que va generando un progresivo abandono de las migraciones de un campo a otro. 

Los alambrados de campos de particulares en ocasiones generan la falta de provisión de comida de viaje para los animales o la escasez de agua para el trashumante. Como consecuencia, muchos crianceros se ven en la necesidad de abandonar estas antiguas prácticas y concentrar sus trabajos en un único lugar. Este aspecto, a ultranza, termina siendo no del todo favorable en lo que concierne al cuidado de los recursos.

Desde el Museo Roca creemos que es importante visibilizar esta situación para que dentro de la toma de conciencia de la cuestión del uso de los recursos y la relación de estos con los ambientes, se puedan tomar medidas que protejan estas actividades tradicionales.

* Por Elizabeth Moreno